Aún ahora existe una controversia sobre la fecha de fundación española de San Miguel. El consenso actual, haciendo algo de matemática, es que pudo ocurrir el 15 de agosto de 1532, fiesta de la Asunción. El dato curioso es que aquel acto solemne no ocurrió aquí, sino a casi medio kilómetro o un cuarto de milla al sur de donde estamos, a orillas del río Chira.
En 1925 hubo un periodo lluvioso tan fuerte, pero tan fuerte, que el río creció extraordinariamente. Sí, El niño. Y esa creciente no solo inundó el Tangarará original sino que lo barrió del mapa. Como en 1932 iban a celebrarse los 400 años de la fundación española, el gobierno peruano montó un nuevo pueblo como pudo, incluso sin mucho rigor histórico y, bueno, quedó así. el promotor y curador del Museo de Tangarará, Milton Murguía, nos ayuda a conocer más detalles.
El actual San Miguel de Tangarará está a unos 25 kilómetros o 18 millas desde la ciudad de Sullana, a más o menos media hora de camino. Hay servicio de transporte público, por cierto. En años recientes, conforme se ha excavado para dotar a Tangarará de servicios de agua y alcantarillado, la gente comenzó a encontrar huesos y vasijas. Y de eso se trata la buena historia para compartir de hoy, de cómo están conservando su pasado.
La tarea para este webcast es que nos cuenten si hay vestigios arqueológicos en su localidad, y si hay algún museo donde se los promueva. Recuerden seguirnos en Google y todas las redes sociales como #unabuenahistoriaparacompartir
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